LUTHARO- VANAGLORIA- UNNAMED (Sala Silikona 226/08/22) Madrid.

Crónica/reflexión César Ruíz Scheitan.

Cuando en la misma semana vives uno de los mejores conciertos que has presenciado en años, por sensaciones, ambiente, salud de la escena… Y te dispones a disfrutar de otro donde lo pasional está a flor de piel y la propuesta de la banda te ha calado, te expones a un fuerte hostión o a seguir sumando altura para un golpe de dimensiones incalculables, por pura física y porque uno ya sabe que a chapuzas no nos gana nadie. No seré yo el incauto que compare a IMPERIAL TRIUMPHANT con LUTHARO, por tirón, por estilo, por veterania, aunque ambos ubicados en ese infinito y hospitalario saco del metal. Pero esto me permite abrir varios melones a modo reflexivo, sin afán de atacar ni herir los sentimientos de nadie.

Como amante y defensor de los conciertos en salas, ansioso de calor y siempre alerta, más ahora ante la escasa oferta (hay que echarle valor), además del mermado catálogo con bajas muy dolorosas (que pena lo de Caracol), soy el primero que piensa que no hay que hacerle la ola a lo Mr. Marshall a ninguna banda solo por el hecho de venir de fuera de España y tener el detalle de bajar a Madrid en sus giras. Pero si mostrar su merecido respeto y al menos estar a la altura, no como piensan algunos por imagen, que también, sino por intentar que las bandas y sus oficinas sigan apostando por la idea de palmar pasta a cambio de tocar en una gran ciudad con una supuesta gran escena.

Los conciertos de LUTHARO e IMPERIAL TRIUMPHANT costaban lo mismo, uno en martes, otro en viernes, uno en la Wurli y otro en Silikona. Los de NY con el público (y ubicación) a su favor, ganado a base de discazos y con envidiable trayectoria, los canadienses a priori con la ventaja de la fecha (quinta de la gira, con buena entrada en Zaragoza y Vigo) y la sala, a pesar de la mala reputación en lo sonoro de ambas. Repito, bandas incomparables sí, pero ¿por qué unos lo petaron y lo de los otros fue lamentable? ¿Por qué esa diferencia de ambiente tan abismal que parecía el mundo del revés de Stranger Things?. Por comparar algo menos extremo y que fue igual de cantoso, ¿por qué ocurrió lo mismo con sus compatriotas STRIKER? quienes también lo petaron en su visita a la Rockville. Pienso que hay un factor determinante, y ahora sí cuentan los estilos, pero sobre todo los años. El público potencial de LUTHARO, a priori, deberían ser amantes del heavy/power/melodeath, y tristemente, estos no salen del sota/caballo/rey, dando cada vez menos chance a bandas debutantes como LUTHARO, excepto si se los enchufan en un festival a una hora prudencial entre dos bandas de cierta solera o alguna que se marque algunas versiones de esas bandas con cierta solera. Luego nos quejamos, pero las anteojeras se llevan cada vez más de serie, espero que disfrutaseis del festival de Morata de Tajuña, guiño guiño.

Me consta, porque lo vi en Madrid, me lo han contado de otras ciudades y me lo confirmó la propia banda, que tanto la promotora como la oficina de producción han estado a la altura, y considero que el cartel con una banda prometedora de sonido accesible, gustos aparte, como UNNAMED, una banda local veterana dispuesta a reventar la sala a golpes como VANAGLORIA y un debutante en pleno ascenso, de cierto gusto clásico, llegado desde el otro lado del charco, suponen un atractivo más que suficiente para acercarse y querer disfrutarlo.

Todo esto como fase previa, lo que allí iba a ocurrir no lo sabía nadie, como mucho se podía imaginar que a nivel técnico no iba a ser ninguna maravilla, Silikona es así, pero como la Wurli también es así. Resultado, uno caótico y otro compensado por la mentalidad abierta de las ascuas del sempiterno y manido relevo generacional. Me niego a creer que a la peña le cueste tanto acercarse a la Silikona por ubicación.

Parece que a nivel técnico, hemos entrado en un bucle donde conformarse es la ley y acudir con la esperanza de ver y oír un buen espectáculo sea algo utópico, hasta el punto de desvanecerse y tirar la toalla.
Lo siento por el tremendismo y por quién esperase una crónica del evento, aunque por supuesto me veo en el deber de alabar la entrega de las tres bandas a pesar de luchar contra los elementos. A UNNAMED por las ganas y perseverancia, a VANAGLORIA por darme la dosis de cera necesaria en un entorno donde nadie iba a sufrir los golpes de mis bailes, y a LUTHARÖ por dejarse la piel (y la garganta) con una sonrisa de oreja a oreja en este ensayo con público que en mi cabeza sonó y brilló maravillosamente.