El pasado jueves 11 de mayo, un jueves; acosado por cánticos festivos de exaltación a la resistencia anti napoleónica, propios de la fiesta de la Comunidad Autónoma y por chulapos y chulapas saliendo en manada de la capital, en busca de merecidas vacaciones; en Madrid acontecía un evento la mar de interesante. Dos bandas jóvenes, pero ya bregadas en escenarios internacionales, comparecían en la veterana, ya clásica, Sala Moby Dick, con mucho que contar y que mostrar, porque demostrar, en su corta carrera ya han demostrado muchas cosas.


HaHablo de Downfall of Mankind, que actuaban como cabeza de cartel y de Voids Legion. Las dos bandas con paralelismos en su historia. Lo primeros, portugueses, radicados en Lisboa, los segundos, de la Capital del Reino; que a parte de sus orígenes peninsulares, se formaron en 2019; cuentan con un LP en su haber, ambos editados en 2022 y tanto unos como otros con una pegada y una reprise que les ha llevado a salir de sus fronteras y convencer con una oferta musical sólida y una presentación impecable, llena de madurez temprana sobre los escenarios.

Comencemos con quienes abrían la noche, Voids Legion. Una progresión meteórica les ha llevado a girar a buen ritmo durante el año pasado con su primer álbum, Awakening the Collapse. Gran trabajo que ya habíamos podido disfrutar en directo. En esta ocasión, veníamos con ganas de reeditar las sensaciones vividas el verano pasado, en la sala Shoko. En esta ocasión venían con novedades. Por un lado, una tercera “M“ se unía a la banda, su nuevo vocalista, Miguel Miguez Mosquera. Más conocido como Triple “M”, es la nueva incorporación, para acompañar a “Eme” y al otro “M”, Brutal Mike. Por otro lado, llevan ya tiempo trabajando en su nueva propuesta musical, en la que ya participa Triple “M” y de la cual nos iban a presentar una primicia.


Y así fué. El set, naturalmente giró en torno a Awakening the Collapse. Comenzaron con Burning the Foundation, a continuación cayeron Gateway to Oblivion, Shall We Fall, Under the Weight of the Black Sun y Flies and Flesh antes de que nos descerrajaran su single de 2019, Behold. Volvieron al LP para hacer sonar Endless Years of Despair y llegó el momento en que Triple “M” anunció con justificado orgullo que iban a presentar el primer single de su nuevo trabajo, ya fabricado por la nueva formación, Reborn.

El tiempo empezaba a consumirse y era momento de ofrecer a la sala un final grandioso con First Fragment of Soil; Enter the Void, otro single de 2019 y su grandísimo Dogma. Sin que hubiese una gran entrada, el público estaba entregado y la interacción de los músicos y sus seguidores fue constante. La comunión entre ambos lados del stage, el propio escenario y la pista, fue total y creo que nos divertimos todos. Sacaron un gran sonido y los temas atronaron a cual más fuerte y mejor.


No hubo tema malo y la interpretación fue exquisita. Se ha notado el rodaje al que se han sometido y la incorporación de Triple “M” ha encajado de manera espectacular. Un auténtico frontman que domina lo que hace, con su garganta y con su presencia, continuamente moviéndose. He de reconocer, que hubo momentos en que le odié por no estarse quieto. No había manera de cazarle con el objetivo, pero es indudable que realizó una interpretación modélica y por supuesto, lo de odiarle era coña ¡Se salió! y al final ¡le cacé!

De Downfall of Mankind podemos decir que se enmarcan dentro de un Deathcore sinfónico y técnico, ecléctico, lleno de pinceladas multicolores que salpican sus composiciones, en las que introducen con soberbia habilidad pizcas de diferentes subgéneros del metal, léase; hardcore, slam, metalcore, death metal melódico… Todo aquello que enriquezca los temas, siempre sin robar un ápice de fuerza, agresividad y brutalidad elegante y magníficamente interpretada.


Su cartera de producciones discográficas cuenta con un EP de 2020, The Path of Human Existence y su flamante y reciente LP, Vile Birth, que asomó la cabeza a este loco mundo en 2022. Feroz sprint desde su formación que les ha llevado a contar con estos dos magníficos trabajos y ha propiciado esta visita para mostrarnos de qué son capaces, presentando su primer larga duración que no tiene desperdicio y con el que hicieron saltar a los pocos asistentes que quedaron para presenciar el show.

Fue una pena porque si bien la afluencia de público no fue masiva con Voids Legion, sí se apreciaba más bulto; pero las horas, comenzó con algo de retraso; el día… Jugaron una mala pasada a los portugueses que, a pesar de todo, se vaciaron en el escenario y dieron un espectáculo excepcional en el que hubo pogo, wall of death y se pasó en un suspiro. Entrando en materia musical, seleccionaron un set basado, cómo no, en Vile Birth. Fueron 6 temas del mismo, arrancando con Altered State of Consciousness. Éste, un temazo rabioso y brutal que ya, de entrada nos puso a todos alerta y se ganó mi respeto y admiración.


Siguieron For I Am Terror; el tema homónimo del álbum; Maker’s Funeral más suave, en una onda más metalcoreta; Beneath the Aftermath, Terriblemente sólido, de guturales profundos, que salen de las entrañas, alternando con gritos desesperados, histriónicos, al más estilo blacker y un sonido salpicado de disonancias y mil recursos que lo hacen, como en sí a toda la actuación, dinámico, variado y que captura tu atención sobre la escena, inclusive, a pesar de que estés con una neurona puesta en sacar fotos apañadas y sólo “la otra”, disfrutando de una sobresaliente actuación que se apoya en un magnífico material.

Finalmente, el subset dedicado a Vile Birth concluyó con Divine Slaughter. Éste último, otro trallazo impresionante en el que conjugan varias de sus influencias, combinándolas con sabiduría, para el disfrute de los escasos asistentes, que lo saboreamos con bendita fruición. De estos dos últimos temas puedes acceder a sus vídeos, publicados en youtube y que os los recomiendo vivamente.


Es tiempo para recordar The Path of Human Existence. Dos temas, Oblivion y Bow to the Crown, entre los que intercalaron su nuevo single de 2022 God of Nothingness. También con su consiguiente representación en la red audiovisual Youtube y que suena pesado, profundo, oscuro, técnico e impresionante. La noche no daba para mucho más. Fue una pena porque me encontré con una cerveza recién empezada y es que no sabía cómo demonios era la hora que era. La sensación en mis adentros era de que aún quedaba mucho show y decidí aparcar la Nikon para disfrutarlo completamente, pero es que me faltó otra vuelta al setlist, por lo menos…

Nada más que relatar, que no haya mencionado antes. Una noche brutal de un metal excelente a la que no acompañó el día ni la hora, poca parroquia, pero muchas ganas y mucha entrega de unas bandas que no es que vayan a ser grandes, es que lo son y por méritos propios. Invoco a los demonios del averno, más capaces en estas lides, a que los empujen porque queremos disfrutar más de ellos.
Texto y fotografías: Juan Carlos López Aguilar.
