
Hay pocos discos que definan y creen un estilo tan claramente como el que cumple estos días 40 años. METALLICA puso la primera piedra de un nuevo género en el año 1983 con Kill’em all. Un disco que llevó más allá al Heavy Metal, aumentando la rabia y velocidad a algo que de por sí es muy agresivo. A ese nuevo estilo se le llamó Thrash metal por el sonido que sacaban la guitarras al rascar sus cuerdas. METALLICA había creado algo que durante algunos años, reinó en el mundo del metal e incluso compitió con los más grandes de la música comercial.
Aquí no vamos a entrar en la calidad de Kill’em all, de eso se ha encargado el tiempo. Aquí sólo estará la perspectiva de parte del equipo de REA, respecto a un disco que para unos supuso un momento importante en su vida y para otros, algo distinto por las circunstancias que cada uno tuviese en el momento de descubrirlo.
De lo que no podemos dudar, es de lo que significa este disco para mucha gente y el nombre de METALLICA, para lo bueno y lo malo; tanto para el género al que ellos le dieron el primer empujón como para la escena del Heavy Metal mundial o el negocio musical…y todo empezó con esta frase que reune un todo en sí misma. KILL’EM ALL!!!

OPINIONES DEL EQUIPO.
Kikemaiden:
Siempre he considerado que la música tiene que tener algo más que simples sonidos para que te atrape y pasen a formar parte de la vida uno. Kill’em all lo descubrí ya siendo un fan de Iron maiden, estando enamorado del Metal aleman e interesandome por otros estilos como el metal progresivo e incluso dentro del Heavy metal español. Antes de que llegara a mis manos el álbum completo, ya había escuchado algún tema suelto por radios e incluso, el tema «Metal militia» formaba parte de una cabecera de un programa de radio de mi pueblo, pero cuando tuve tiempo para degustarlo por entero, fue un disco que me pasó sin pena ni gloria. No me aportó prácticamente nada a mi necesidad musical y tal cómo vino, se fue. Ni siquiera sus continuaciones han sido interesantes para mi a excepción del ... And justice for all. Pero eso es otra historia.
La que tenemos aquí hoy es la historia de un disco que para mucha gente es clave, básico y esencial para un género que ha hecho que muchas bandas tomasen cómo referencia a METALLICA y el Kill’em all para su desarrollo musical. Sin embargo, para servidor es un disco más de un grupo más como tantos otros han pasado por mis manos y que curiosidades de la vida, cualquier disco de otra banda del mismo estilo me ha aportado más que este clásico atemporal. Porque eso no voy a negarlo, le doy todo el mérito del mundo por ser clave en la evolución del metal extremo en sus primeros pasos de vida. Amén!!!

Cesar Ruíz Scheitan :
El debut de los todopoderosos Metallica me pilló demasiado joven, por lo tanto, desde un prisma en el que revisaba el album más de 10 años después de su publicación, ya habian pasado (y atrapado) ante mi Possessed, Slayer o Venom, por hablar de bandas que sonaban thrashers a la par que poderosas, violentas e innovadoras. Unas se atribuían la medalla de pioneros del death metal y el black metal por sendos titulos en sus temas insignia, sin sonar a los subgéneros tal y como los idenficamos posteriormente, y la otra simplemente desplegaba un arsenal sonoro fuera de lo normal, y para mí pionero del thrash de mano izquierda con la publicación de la obra maestra «Show no Mercy» (1983).
Con este contexto, reconozco que ya era presa de «Ride the Lightning» y «Master of Puppets» cuando llegué a «Kill’em All», y en ese momento, me resultó un disco más, con sonido y actitud de debut de ese otro thrash más lúdico-festivo, que se cagaba en el heavy metal académico; muy macarra y gamberro. En el ejercicio antropológico de aquel momento tuve que otorgarle su mérito de aquel gran movimiento en la costa oeste (del big4 siempre me posicione del lado de Anthrax, por supuesto sin contar a Slayer, que para mí siempre fueron inmensamente superiores al resto).
Con el paso del tiempo, es imposible no llevar en la sangre «Seek & Destroy», «Whiplash» o «Metal Militia», además de reconocer la importancia del álbum debut de una de las bandas más grandes e influyentes del universo metalero, pero que para mí, no dejaba de ser una de esas pocas bandas que podia pinchar en las acampadas.

Bea Bathory :
Sorprendentemente, me vi agitada por el aviso de una red social (a veces, hasta sirven) que mencionaba el 40 Aniversario de uno de los discos, que guste o no, marcó un antes y un después y que creo, le debemos muchos habernos metido en esto del metal. Se trata del álbum debut de los Angelinos Metallica llamado “Kill ´Em All”. Un 25 de Julio de 1983 publicaban dicho disco.
El cómo descubrí al cuarteto a la edad de 16/17 años fue así: Yo estaba por aquel entonces enganchada a los Guns And Roses cuando un amigo pronunciaba una frase: Escucha esta banda y flipa. Se trataba del álbum “Master Of Puppets” (1986). Si estás leyendo estas líneas, Gracias Dani por descubrirme lo que se convirtió entonces en verdadera adicción. Y tanto que flipé. Rebuscaba por donde fuera cosas de Metallica, escuchaba Radio 3 por las noches por si anunciaban algo nuevo, me juntaba con todos aquellos cuyas melenas largas, pantalones pitillos y cazadoras con parches de la banda tuvieran cosidas a ellas, y regrababa los temas en cintas, ya que económicamente. poca gente se podía permitir lo que era el discman. Entonces cayó en mis escuchas el disco “Kill ´Em All”. No era nada parecido a lo que había escuchado hasta entonces de ellos, eran sonidos que había oído en otras bandas como Anthrax, Slayer o Testament, pero me encantó.
A los 18 años decidimos tres incomprendidas que vivían en un pueblo de León, montar una banda de música que mucho tuviera que ver con Metallica. Nos llamamos Anikilación. Queríamos una fusión de música moderna con Metal. Para ello , tuvimos que aprender solfeo y mis primeros acordes fueron con “Seek & Destroy” y mi tema fetiche “(Anesthesia) Pulling Teeth”, que sacaba de un libro de partituras que le llevaba a mi profesor y colega todos los viernes, fotocopiado de la escuela de música. Se convirtió en un disco que amaba y a la vez odiaba por toda su dificultad. Llegué a tocar el tema “Seek & Destroy” al completo. Recordé en ese momento a uno de los mejores bajistas que ha habido dentro del metal como fue el sueco Cliff Burton. Evidentemente, yo tocaba el bajo y bastante mal, por cierto. El grupo se disolvió a los pocos años.

Ya no escucho a Metallica nunca, puede ser porque su música ya no me interesa y todos esos cambios venideros no son para mí, pero muchas veces miro la cinta de cassette que tengo del álbum “Kill ´Em All» y una sonrisa amplia sigue invadiendo mi cara con cierta nostalgia.

JuankiCacoMan:
Antes que nada, decir que ¡discazo clásico! Su lanzamiento me pilla a la tierna edad de 13años, recién arrojado a las fauces del Imperio y procedente de las colonias, andaba perdidísimo y más metido en la “movida del barrio”. Ahí, entre rumbas y “Jevi Metal”. Lo que
conocía era OBÚS, que me lo acababa de descubrir mi primo, mayor que yo, porque el batería era colega suyo y BARÓN ROJO, porque todavía no existía VOX. El inglés, ya sabéis… Pero yo no sabía y el Google Translator que andaba en la guardería. Reconozco que mi paso por METALLICA fue bastante tangencial.
Dicen que cualquier tiempo pasado fue mejor. Aquel, no. Demasiada droga y demasiada destrucción. También dicen que cualquier disco pasado fue mejor, y tampoco. Lo sitúo en el Olimpo del metal por lo que significó, en el momento y a lo largo de todos estos años. Ha evangelizado a muchos en este tiempo, pero igualmente, muchos de aquellos que despertaron con KILL ’EM ALL no supieron “to RIDE THE LIGHTNING” (cabalgar el rayo), que a mí, personalmente, me gusta más y se quedaron anclados en el pozo de los 80. Con todo ello. ¡Ole sus surcos! y ¡Felicitaciones a los premiados!

Sammael F.H:
A nivel personal no puedo decir mucho de cuanto me influyó este LP. De entrada aún no estaba ni rebotando en los huevos de mi padre el día que salió. Aunque quien tuvo la oportunidad de vivirlo en su día fue mi tio. Quien luego tiempo después, tanto como que un humilde servidor tuviera 9/10 años, me presentó a Metallica. No con este disco, si no con el posterior «Ride the Lightning», sentando asi de alguna manera lo que a posteriori acabaria siendo mi propio gusto musical, aunque los origenes no fuesen tan extremos como lo que habitualmente suelo tocar.
Evidentemente eso supuso hasta cierto punto escuchar este «Kill ‘Em All» aunque, sinceramente, tampoco llegó a suponer una influencia para mí. No obstante y a pesar de todo reconozco su merito principalmente como un trabajo pionero en cosas que acabaron surgiendo después. Influenciadas en mayor o menor medida por este LP. Y que acabaron siendo germen para generos que son mi pan de cada día dicho así.

Carlos Citoler:
No suena para nada true metalero, pero fueron varios años después de su salida oficial cuando Kill ‘Em All llegó a mis oídos. Y curiosamente, podría decirse que gracias a la intervención divina,…
De lo poco salvable del hecho de perder multitud de tardes de juegos con los amigos por preparar el canibal acto de la primera comunión, es que esta llevaba aparejada algún que otro regalito para el futuro marinero o la princesita de la casa. En mi caso, a parte de alguna escopeta de perdigones y una caña de pescar (había comentado que vivo en un pueblo?), apenas los recuerdo. Pero en el de mi hermano pequeño, el milagro del cassette de doble pletina cambió mi vida y despertó mis sentidos, sobre todo, el del oído.
Que los chicos mayores, los malotes, me pidiesen que les invitase a casa para poder grabarse entre ellos sus últimas adquisiciones, que como he comentado, llegaban con años de retraso a la pequeña aldea oscense, fue un subidón de ego y adrenalina que recuerdo con cariño. El hecho de que mi pobre madre nos ativorrase a bocatas de Nocilla también contribuía a mi ascenso social.
No os voy a mentir, no recuerdo cómo acabó aquella copia de copia de copia del debut de Metallica en la pletina principal del viejo cassette, ni quién fue el portador, solo sé que una de las copias piratas se quedó en mi poder, imagino que más por insistencia de su propietario que por propio interés, ya que por aquel entonces, aquellos riffs de guitarra machacantes, la voz de James sonando acelerada y agresiva, y la normal perdida de calidad tras tantas copias a sus espaldas no llamo mi atención hasta algún tiempo después. No fue amor a primera vista ni mucho menos, menos todavía en un territorio en el que el rock urbano campaba a sus anchas y Los Suaves, Barricada y Rosendo se llevaban todos nuestros ahorros en cintas de 90 minutos.
Sin embargo, recurrir a aquella maltratada cinta cada vez se hizo más habitual, y la avalancha sonora de un principio fue cristalizando y depurando su sonido, algo a lo que ayudó el hecho de que el famoso cassette de doble pletina incluía también una radio bastante decente, y por aquel entonces, si eras hábil con la ruedecilla del dial, podías pasar las tardes saltando de emisora local en emisora local, todas ellas, oh sorpresa, con más de un programa semana en su parrilla dedicado a nuestra ruidosa música,…
Era el nacimiento de un nuevo sonido al otro lado del charco, comentaban algunos locutores, lo más duro y rápido que llega del nuevo continente, según otros. Mientras, los temas se iban clavando en mi subconsciente, en el del mundo en general, y el resto es historia. Masters, reparto de justicia, álbumes negros y puñetazos, literales, en la boca del estómago es lo que nos han ofrecido los 3 +1 chicos de oro, amados y odiados a partes iguales pero que, a fecha de hoy, nadie puede negar que son una máquina perfectamente engrasada.
Máquina de fabricar qué? Música? Dinero? Ahí te toca a ti mojarte.
Lo que está claro es que tras 40 años, ni Metallica, ni tú ni yo somos los mismos, y lo más cerca que podemos estar de aquella época es apagando las luces, dándole de nuevo al play, esta vez en la plataforma de streaming a la que estés suscrito, y suspirar por las cintas de 90 y los bocatas de Nocilla que ya no volverán.

Fali:
Contando desde el “Black album” para atrás, “Kill em´all” es posiblemente el disco de Metallica al que quizá menos atención presté.
Conocí la música de Metallica, en 1988, año en el que editaron “And Justice for all” y mi abuela me lo regaló para el cumpleaños. A raíz de ahí, me interesó la música de banda y fui descubriendo sus anteriores trabajos. Los escuché todos, y todos fueron de mi agrado, incluyendo ese magnífico ep de 1987 conocido para los colegas como “El Garaje”, que es como le bautizamos en mi barrio ,y que os diré, lo trillé incluso más que alguno de sus otros trabajos.
Pero hoy estamos aquí para recordar y felicitar “Kill em´all” el disco con el que la gigantesca banda Metallica apareció en escena para con los años convertirse en lo que es a día de hoy, la banda de Metal mas reconocida del planeta. Como dije, quizá sea el disco que menos escuché de la banda (recordad que desde “Black album” para atrás) pero tuvo en mí una repercusión muy grande. Diez canciones donde todas han pasado a ser himnos y que sonaron constantemente en el radio cassete de los colegas cuando bajamos a la calle. “Wiplash”, “Hit the lights”, “The four Horsemen” y sobre todo “Seek and Destroy” fuero, son, y serán canciones que marcaron una época. Además, se le puede conceder el privilegio de ser artífice de colocar las primeras piedras de lo que sería el Thrash Metal. Sin “Kill em´all”, quien sabe, si nuestra música sonaría igual a día de hoy. Por ello, ha de ser recordado de por vida como piedra angular del Metal.
Podrían escribirse cientos y ciento de líneas hablando de este disco, pero no, aquí no lo haremos. Aquí felicitamos a “Kill em´all”, por tanto que nos dio.
Y hasta aquí las distintas opiniones que tiene una parte del equipo de REA donde se demuestra la importancia del momento en el que se descubre un tema, un disco o una banda. Cada uno tiene su clásico y su piedra que cimenta la pared del rock.
