Reseña de Kikemaiden.
Humildad y dignidad son las palabras que me transmite Mark Briodi cada vez que saca un nuevo trabajo con sus JAG PANZER. Uno de los estandartes más importantes del US metal desde los primeros 80. Da igual el tiempo que tenga que pasar entre disco y disco o que sus giras sean pequeñas y a cuentagotas para sus seguidores, pero sabemos que lo que haga, está hecho con cariño y cuidadosa dedicación para que el nombre de su banda nunca se arrastre por los suelos o salga mal parada de cualquier proyecto que se lleve a cabo. Al contrario de otras bandas que están mantenidas por el tema económico solamente como mis amados Running wild o alguna banda más que omito para que sus fans no se enfaden y con esto, ya sabéis más o menos de quienes habló. JAG PANZER mima y cuida hasta el último detalle cualquier lanzamiento que realiza, independientemente del éxito que pueda tener al ser una banda minoritaria y de culto. Y eso, el primero que lo tiene claro es su lider y fundador, Mark Briodi.
El secreto de mantener un status con sus seguidores y no decepcionar, es saber lo que tiene entre manos y con las armas que cuenta. El tener a su lado a dos músicos fieles del nivel de John Tetley al bajo y Rikard Stjernquist a la batería garantiza una coherencia y fiabilidad que da seguridad a Briodi a la hora de componer cualquier tipo de composición para la banda. Tetley lleva toda la vida con él y Stjernquist hace más de 30 años que sigue sus pasos a la vez que ha participado en otros proyectos como Ballistic o Benedictum.
Otro plus para que JAG PANZER mantenga el magnífico nivel es la elección de los guitarristas solistas que acompañan a la rítmica de Briodi. Si exceptuamos la etapa fallida del Disident Alliance a los inicios de los 90, por ellos han pasado Joey Tafolla, Chris Lassange o Chris Broderik. Tremendos músicos que han demostrado su capacidad en las seis cuerdas con JAG PANZER y otras bandas, entre ellas Megadeth. En la actualidad cuentan con Ken Rodarte, un desconocido guitarrista que no desencaja en absoluto y que lleva cerca de 5 años con ellos haciendo giras y que alterna en la actualidad con la banda Tynator. Sin embargo y a pesar de contar con suficiente calidad en la banda en todos sus miembros en la parte instrumental no se puede negar que gran parte del éxito es la voz del señor Harry «The Tyrant» Conklin (Tyran Pace, Riot, Satan’s Host, The three tremors). Un auténtico salvaje a las voces, con sus virtudes y defectos. Capaz de hacer con su voz lo que le dé la gana, llegando incluso a desentonar en algunos temas siendo parte de una de sus características mas únicas y que a las primeras veces que lo escuchas te resulta extraño e incluso chirriante, pero que con el tiempo pasa a ser una marca de la casa.
The Hallowed es el décimo álbum de la banda. Y si con The score of light del 2011 y The deviant chord en el 2017 actualizaron su sonido dandole un toque más potente y veloz y con una producción más acorde a nuestros tiempos, con The Hallowed vuelven al sonido más añejo y clásico, recordándonos a etapas de los finales noventa e inicios de los dosmiles como The fourth joudgement, The age of mastery o Thane to the throne. Incluso, pueden llegar a recordar a su debut Ample destruction editado en el año ’84 con el tema «Stronger than you know». Con esos riffs simples y directos, pero llenos de punteos y sólos rapidísimos y esas dobles armonías que nos ponen la piel de gallina. Con un Conklin desatado a las voces y estribillo antológico.
Pero antes, ya nos habían iniciado este The Hallowed con «Bound as one», un gancho directo al cerebro con todos los elementos que a JAG PANZER les ha hecho grande para gente como servidor. Con «Prey» Briodi demuestra que la incorporación de su compañero Ken Rodarte a la guitarra solista, es perfecta y trabajazo de la base rítmica. La influencia de Maiden siempre ha sido clave en la banda y Briodi nunca lo ha escondido, al contrario, siempre ha hecho gala de esta cuestión, pues «Ties that Bind» tiene un regusto al «Revelations» de Maiden innegable pero con la personalidad de los norteamericanos que se te olvida pronto esos vagos recuerdos al clásico de los británicos. «Onward we toil» tiene la magia que todo fan de JAG PANZER desea. Composición clásica de la banda que hace que mi adoración por Briodi y cia. crezca con los años. Solo estratosférico de Rodarte. Temazo y punto!!!
Galopante y épica es «Edge of a knife» y «Dark descent», continua la magnífica senda que lleva The Hallowed que de momento es intachable y que con los punteos del inicio de «Weather the storm» refrenda mi opinión y menudo estribillo tiene este tema que coronan con las armonías tan clásicas y melódicas marca de la casa. «Renewed flame» nos devuelve a la etapa del Thane to the throne del 2000. Tema que saca a relucir la influencia que ha tenido Skyclad con sus violines y que de forma puntual ha utilizado Briodi para alguna de sus composiciones. Sin embargo, aquí tengo que poner la única pega de todo el trabajo y es a un arranque tan extraordinario de tema cuando llega el desarrollo instrumental, no me gusta nada la rítmica que adopta para acompañar a los punteos y sólos que son geniales. Apenas unos segundos que no pegan en nada. Por lo demás, temazo.
Despide «Last rites», tema de más de nueve minutos que hace que me olvide de ese pequeño pero que le pongo al tema anterior. Un medio tiempo épico y que sólo engrandece un disco casi perfecto bajo los cánones que un seguidor de esta banda desea.
Poco más de 40 años después de su fundación, que este tipo de bandas sigan ofreciendo discos con la calidad que JAG PANZER nos ha ofrecido, hacen que me sienta orgulloso de haber descubierto en un momento de mí vida su música. El tema conceptual sobre el que se basa The Hallowed y otras cosas cómo su portada y producción os lo dejo a vosotros que investigueis, creo que mi parte, ya está hecha.
Gracias Briodi!!!
Rock Entre Amigos 
Un comentario sobre “Grupo: JAG PANZER. Disco:The Hallowed. Sello:Atomic Fire Records. Año:2023”