Por Bea Bathory
Siempre hablamos del sonido Goteborg, pero para mí hay un sonido también contundente y muy muy reconocido y ese es el alemán. Hermanado con esa Suecia de los 90 pero con unos riffs característicos y como una apisonadora, la banda Nearea acaba de publicar su 8 LP llamado “All Is Dust”.

Soy muy fan de los alemanes porque lejos de parecer más melódicos siempre arrasan con nuevo álbum. 10 temas aplastantes que los de Munster publican 4 años después de su homónimo “Neaera”. Pero, hay un pero, sonidos desleales que juegan la mala pasada de ser reconocidos tema tras tema en anteriores discos. Desde su publicación han salido nuevos detractores de la banda por sonar todos los singles semejantes. Y diré en defensa de los alemanes que puede que sea así, y que ya no son los que eran, pero quizá una nueva era personal en la que compaginar familia, giras y grabaciones es muy difícil cuando llevas 21 años. O lo que viene a ser lo mismo, son auténticos. He de reconocer que se me hizo un poco bola el disco, y ya ha pasado casi un mes desde que le pegué unas 4 escuchas y he empezado a quererlo. Al final, se hace querer porque son prácticamente los mismos de siempre, aunque más melódicos. Sus inicios en 2003, fueron tirando hacia quizá el metalcore, pero pronto tendieron la mano hacia el death metal melódico siempre mirando a la fría Suecia. Ira en sus letras de tinte social. Ira y calma. Esas palabras, lo resumen todo.
«Antidote to Faith” descubre el mundo que los alemanes traen de nuevo, mucho más sosegados. En ocasiones muy armónico. No voy a profundizar en en este nuevo trabajo y destacaré temas como “Swords Unsheathed” cuya melodía inicial te embauca para llevarte por el sendero de ese melodeath recordándome esa parte más bien nórdica con la voz de Benjamin Hilleke variable. Agresividad tiene, no digamos que no. “Edifier” y “Render Fear Powerless” es oldschool. Un recordatorio de que ellos están ahí, un poco a la sombra de bandas de su tierra natal como Heaven Shall Burn. Luchadores natos por sobresalir en la escena de metal extremo y es “Into The Hollow” el tema final de estos 10 singles que después de escuchar este LP te deja sonriendo. No es un álbum para volverse loco, pero ellos son así, los cambios no van con el quinteto que también abraza ese death metal melódico estadounidense, no es una evolución. Algunos no lo necesitan. Quizá hasta lo agradecemos sus oyentes, después de escuchar tanta y tanta programación.
