Con un mes de agosto exhausto y acabado, comenzaba septiembre repleto de eventos ilusionantes. El primer viernes, día 6, se reunían en la Sala La Trinchera de Vallecas (Madrid) y auspiciado por los activisímos QUINTESSENCE METAL CLUB, los madrileños DISAGRADABLEMENT, los también capitalinos y habituales de nuestras salas ERGUM y los visitantes, montañeses CASON BRENA.




Muchos proyectos por venir eran la comidilla de cada corrillo. Un inminente festivalazo como era el oscense Black Templar, en el que también QUINTESSENCE METAL CLUB formaba parte de la organización y un precalentamiento de altura un par de días días antes del mismo. Ninguno de ellos pudo oscurecer aquello que se nos venía encima en la entrañable Trinchera.




Con una entrada aceptable de algo menos de 100 valientes, saltaban, los tres grupos, a la arena del circo de Metal Extremo en que se convirtió la sala. Los primeros gladiadores, DISAGRADABLEMENT. Arrancaron con una fuerza demoledora y un front que no conocía el agotamiento. Moviéndose por todo el escenario, que se le quedó pequeño y lo amplió compartiendo momentos entre el público. Gestos, poses, todo lo habido y por haber para enganchar con el público y vaya que lo consiguió…




Arropado por una banda solvente, diligente y cohesionada, no hubo brechas en su Death/Doom directo, incisivo y dinámico. Nos arrastró a seguir su ritmo de la manera que fuera, agitando cabezas, saltando, pogueando… Pero siempre bajo la atenta mirada del Controlador de pogos oficial que identificado con un chaleco reflectante, no se perdió el más mínimo movimiento sospechoso, uniéndose a él. Un abrazo por tan divertida ocurrencia. Representó un triunfo que, a pesar de ello, las fotos no salieran movidas. Todo un lujo haber podido disfrutar, en primera fila y aunque mayormente a través del visor de una cámara, de tal derroche de energía, simpatía y buen hacer.




Se marcaron un setlist de 7 temas en los que jugaron entre un Doom pesado pero movido de algunos temas y un Death agresivo en el resto. Esos momentos más lentos, pesados y oscuros en ningún momento rompieron el ritmo que marcó, desde un principio esta banda, que con pocos bolos a su espalda dio un rendimiento y un empujón soberbio para acometer esa difícil tarea de iniciar una sesión de Metal Extremo y tremendo. Compartieron con nosotros los nuevos temas que compondrán su nueva entrega discográfica. El público recibió en sus tripas el esfuerzo, la creatividad y la dedicación de DISAGRADABLEMENT y disfrutó de una actuación muy, muy interesante.




La noche discurría vertiginosamente y tanto la sala como los alrededores se poblaban de aficionados entre los cuales reconocíamos muchas caras a quienes saludar y con quienes compartir unos momentos. La segunda andanada de la noche iba a dispararse sin más dilación que el cambio de equipo. Una nueva cuadrilla de aguerridos luchadores del Death Metal tomaban posiciones en la arena de La Trinchera, dispuestos a desencajarnos las cervicales. ERGUM reclamaba, por derecho propio, la atención de una parroquia que, con los cuellos ya calientes, aguardaban ansiosos el comienzo de su repertorio.




ERGUM, como viejos conocidos que son, salieron a darlo todo. Edward, al frente, vivía con la intensidad habitual cada tema, pareciendo que entraba en éxtasis y transmitiendo todo ese sentimiento y la fuerza de una banda que suena fantásticamente y funciona como una máquina de precisión, de tal manera que al público, a su público, por muchas veces que los veamos siempre nos sorprenden con su evolución y entrega. Fueron 18 temas rápidos y cortos de un Death Metal brutal, que agitó hasta poner a punto de nieve a una feligresía entregada ¡Cuando vas a ver a ERGUM, sabes a lo que vas! Temas impactantes de su conocido álbum “Dokhma» y nuevos que esperamos ver pronto editados en el formato que sea.




Último cambio de escenario y todo preparado para recibir a los forasteros CASON BRENA que, tras este concierto, siendo la primera vez que con esta formación se presentan en Madrid, se han convertido en “uno de los nuestros”. La actuación consistió en un recital de rabia, fuerza y Death Metal rápido y sin compasión que no dio descanso a nadie. Cueto, su estandarte y vocalista, no paró ni un momento, ya hincándose de hinojos, ya saltando la valla divisoria del escenario, ya presente en un extremo del escenario, ya en el otro, regalando pasión y entrega, regalando expresiones, gestos que cada vez le unían más al público, que traía ganas de descubrir qué podían ofrecer en directo, estos “lobos” de allende los montes cántabros.





CASON BRENA es una banda fundada en 2020 que cuenta con un álbum, “Injurias”, en su haber, que nos presentó, junto a un par de temas nuevos que deglutimos con fruición. Con un bajista recién incorporado a la banda, resolvieron con solvencia el setlist y deleitaron a un público deseoso de recibir toda esa energía que CASON BRENA, exudaba por cada poro de su piel. Luego en el post concierto pudimos hablar con ellos y comprobar que toda esa agresividad se convertía en calidez y encanto. Una banda a seguir y esperemos que repitan pronto en nuestras salas. Las puertas, las han abierto de par en par por méritos más que justificados.




La sesión de locura en La Trinchera finalizó, pero tanto la gente que vino a los conciertos como aquellos que se acercaron más tarde a saludar, continuaron por las inmediaciones y nos fuimos encontrando por locales de la zona. Agradecidos por una gran noche de Metal, camaradería y esfuerzo por parte de las bandas, de la sala y de la organización, QUINTESSENCE METAL CLUB, que nos brindó momentos espectaculares dentro del más puro, auténtico y honesto underground.
Texto y fotografías: Juan Carlos López Aguilar.

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