Por Bea Bathory
La primera vez que tuve contacto con el vocalista de Body Count, el legendario Icé-T fue en mi niñez en León. En la zona de Correos, cerca del centro histórico los chavales se reunían para bailar break dance, y allí estaba mi primo compitiendo con los mejores de la ciudad. Una música pegadiza te absorbía y eso que yo ni idea tenia de que era o quienes eran los que allí sonaban en cintas de radiocasete pintadas, pero hacías corrillo junto a la juventud del barrio y coreabas ciertos temas. Entre ellos los de Body Count. Años después, mejor dicho, muchos años después, comencé con el skate en la capital madrileña, todos queríamos o pretendíamos llegar a ser Tony Hawk y soñar con ese 360 y mi BSO diaria eran AFI, Refused, Cypress Hill, 36 crazyfits, Killswtich Engange y como no Body Count, ese tema del 92, yeahhh MotherFvcker.. “Body Count´s in the House”, regresaba de nuevo a mi vida.
Ya más adulta, reparas en todo lo que sucedió con el tema que más controversia creo de su álbum debut underground “Cop Killer”. Se montó un buen follón, tanto así que Warner Bros decidió rescindir su contrato. Sobra decir la alusión a sus letras, sus sonidos tenían que ver con la violencia callejera. ¡Joder! como se las gastaba Ice T, delincuencia, venta de estupefacientes, así eran las cosas… Pero, a temprana edad gracias a su primo de Los Angles descubrió el Heavy Metal y llego la alegoría. ¿Podía fusionar el metal con el rap? Por supuesto. Había creado un nuevo estilo, rap metal que posteriormente también introdujeron Public Enemy junto a Anthrax. ¡Ay! Que tiempos aquellos.
Estamos hablando de Tracy Lauren Marrow, más vulgarmente conocido como Ice.T. Estoy hablando del rapero de 66 palos que publica tremendo álbum “Merciless” y se trae a sus colegas para pegar unas cuantas hostias en la jeta en su cruzada contra gobiernos de derechas, policías anárquicos y el abandono de la comunidad afroamericana. Ice T & Co, no dejan títere con cabeza. Producido, una vez más, y sale este nombre a relucir, Will Putney (Fit For An Autopsy, Counterparts.). Ice T dice que a partir de ahora, reinventará los subgéneros y que Body Count hace grindhouse. Como lo quiera etiquetar, pero sus sonidos son monumentales.
Limpieza de calles en “The Purgue” junto al gran George “Corpsegrinder” Fisher cuyo tema destroza al estilo Cannibal Corpse. Dura crítica a los cuerpos de seguridad a un ritmo vertiginoso, y traerse de compinche a George es sinónimo de trallazo. No gritéis, no os asustéis, pero anda suelto un jodido psicópata con su motosierra y lo gozan Ice T y M. Joe Bad (Fit For An Autopsy) en un temarraco llamado “Phychopath”. Extremadamente delicioso. ¿Os habéis parado a observar los colores de la portada del álbum? ¿Es una crítica a los dos partidos políticos que copan el mundo? Ahí lo dejo. Siempre alabo los álbumes con colaboraciones porque hacen que salte esa fusión de mentes, y atarse a uno de los pioneros del metalcore como es Howard Jones (ex Killswitch Engage) en “Live Forever” engrandece el tema aun más. Salvajada exquisitamente demoledora. Brasileiro de nacimiento, Massimiliano, mas conocido como Max Cavalera (Sepultura, Soulfly) acaricia ese thrash metal junto a Body Count en “Drug Lords” y es que estos dos tipos saben muy bien lo que hay en las calles, las pandillas, los suburbios. Siempre se ha dicho que los que escuchábamos metal éramos los parias, los raros, macarras. ¡Que viva el underground grito! Una gozada absoluta y remember en muchos aspectos este nuevo LP de Body Count, una explosión de energía, actitud y metal. Dadle una buena escucha. Ice T formará parte de la historia guste o no.
Rock Entre Amigos 