Cronica del KAOS ZONE FEST 2024 con S.A, ANGELUS APATRIDA, HAMLET y CRISIX en el Wizink. 22/03/24.

Textos de Bea Bathory y ElSolodetransyl.

Fotos de ElSolodetransyl .

En estos últimos quince días de marzo estoy amortizando la cámara Canon que me regalaron mis padres allá por 2016. La última vez que le di uso fue en un viaje a Marruecos con la que hoy es mi mujer ( Marraquesh está sobrevalorado, por cierto. Cogeos un coche y atravesad el Atlas, merece la pena. Palabra).

Los motivos que han desempolvado la cámara han sido el concierto de Angra en Vigo, cuya reseña tenéis en esta misma página, y éste que nos ocupa hoy, el KAOS ZONE FEST en el Wizink de Madrid.

Mientras otro conocido medio, cuyo nombre no desvelaré aquí, y yo mismo procedíamos a acreditarnos en la zona de prensa habilitada para ello, CRISIX estaban en pleno concierto. La organización nos explicaba las instrucciones del foso para fotógrafos, mientras nos llevaba por los pasillos del polideportivo: “Os corresponden los tres primeros temas de cada grupo. Una vez terminen esos tres temas, salís del foso”. El miembro del staff abrió una puerta, y ya estábamos dentro del recinto. CRISIX, muy a mi pesar estaban finalizando su concierto. “Tenéis que estar aquí antes de los conciertos de cada banda” dijo señalando a una esquina situada a la derecha del escenario, custodiada por un miembro de seguridad.

Como a CRISIX no pude verlos (es lo que tiene levantarse a las 7 de la mañana, coger un vuelo desde Vigo, llegar a Barajas, perderse en el metro, encontrar el alojamiento, comer, y cometer el error de “voy a cerrar los ojos 10 minutos para resetear la olla” tras una semana intensa de curro) hemos acordado realizar la crónica a dos manos, siendo esta nuestra primera colaboración entre mi compañera la gran Bea Bathory y un servidor.

Éstas son las vivencias de Bea con CRISIX:

Dia 22 de marzo de 2024. Un día, o mejor dicho, tarde noche, esperada por muchos de nosotros. Se daban cita las mejores y veteranas, y no tan veteranas, bandas nacionales en el Espacio Wizink de Madrid. Ese día descargarían toda la adrenalina CRISIX, HAMLET, ANGELUS APATRIDA y los cabezas de cartel: SOZIEDAD ALKOHOLIKA.

Llegué casi con la hora justa mientras nos esperaba otra asidua a conciertos como es la nueva colaboradora de Rock Entre Amigos Podcast, Patri.
La calle estaba abarrotada de camisetas negras, siendo mayoría las de SOZIEDAD ALKOHOLIKA y ANGELUS APATRIDA las que copaban gran parte de torsos metaleros.

Eché la mano al móvil para ver si mi compañero de Rock entre amigos podcast estaba por allí y no tuve noticias. Llegaba de su Vigo natal, tenía ganas de conocer al inigualable “ElSolodetransyl” personalmente. Esto empezaba, así que a disfrutarlo y a darlo todo.

Puntualmente salieron los de Igualada, CRISIX, frente a un público más bien parado. He de decir, que tenía enormes ganas de ver a los catalanes. Nunca había podido degustar un directo de este quinteto que por H o por B siempre me había perdido, y que tras la entrevista del maestro KikeMaiden todavía tenía más ganas de gozarla con los thrashers.

Repaso de todos los álbumes haciendo hincapié a su último trabajo “Full HD”. Solo les faltaron 5 minutos para hacer arder la pista. Un aire fresco procedente de estos chicos fundados en 2008 hacía espabilar a los que allí nos congregábamos. Éramos pocos, pero ruidosos. Un Thrash metal moderno, con un vocalista como Juli que se comía el Wizink con cada nota procedente de su garganta. Repasaron temas como “Full HD”, “Get Out My Head”, “World Need Mosh” y como colofón final un tema de su primer álbum “Ultra Thrash” que hizo enloquecer a todos los congregados con un circle pit digno de ellos. Como anécdota divertida, la videollamada que le hizo el vocalista sin previo aviso a su batería Javi “Carry” que estaba convaleciente y se tuvo que perder la fiesta.

40 minutos que se me hicieron bien cortos. He disfrutado muchísimo de los que para mí y lo digo alto y claro (a pesar de ser fan incondicional de HAMLET desde hace 20 años) fueron los mejores de la noche con un directo impresionante, pero sobre todo divertido, rápido, adrenalínico y porque no decirlo, se salieron. Y como dice uno de sus temas: “World Needs Mosh”.

Al término del concierto llegaba la hora de conocer personalmente a “Elsolodetransyl”. Ataviado con su cámara visualicé con alegría al que sería y será el compañero de varias crónicas en Rock Entre Amigos Podcast. Ahora, dirigirá como él sabe el resto de tremendo evento.

Hechas las presentaciones, las fotos para el recuerdo (tengo una pinta de guiri acojonante en esas fotos con la cámara colgada al cuello) y tras un rato hablando con Bea, llegaba el momento de HAMLET. El timing de las bandas se estaba cumpliendo a rajatabla. Conté fácilmente unos 15 medios acreditados para el foso. No soy fan de HAMLET, pero sí de representar adaptaciones de las novelas de Shakespeare en auditorios y plazas de las Rías Baixas con mi grupo de teatro. El movimiento de los fotógrafos, de una esquina a otra, agachándose para no entorpecer, buscándose la vida, para sacar las instantáneas me recordó a un ejercicio de teatro cuya única norma es tan sencilla como: «yo no voy adónde va el compañero».

Otra máxima del teatro es la de ocupar el espacio, hacerse grande. No puede haber un hueco libre en el escenario. Si hay un hueco libre, hay que ocuparlo. De ello se encargó HAMLET.

La sensación que tuve desde abajo, en esos tres temas que nos permitía la organización, es que salieron con una energía increíble, con Molly a la cabeza y uno de sus guitarristas de pelo rizo cuyo nombre desconozco, y que creo me dio buenas instántaneas, es que estaban enchufadísimos. Se hicieron grandes. Ocupaban todo el escenario, que no era precisamente pequeño. Me quedó grabado su tema «Denuncio a dios» que si no me equivoco tocaron en segundo lugar.

Tras esos 3 temas, la organización nos echó correctamente del foso, y para ser sincero…para ser sincero yo estaba en éxtasis. Entendedme, reitero que no soy fan, ni controlo a HAMLET, pero cuando alguien sale así de enchufado a un bolo, ya sea en un espacio como en el Wizink, o como por ejemplo, el pub Transylvania de Vigo, esa energía se transmite de la banda al público. Y si a mí que estaba allí sacando fotos como persona neutral, me transmitieron la energía, imaginaos al público fan.
Necesité unos minutos para asimilar lo que acababa de vivir y calmar los ánimos, porque quedaba mucha noche por delante. HAMLET siguieron su concierto y mi ritmo cardíaco volvía a ser normal. Di una vuelta por el polideportivo, observando las infraestructuras. Temía que este festival se quedase en una honrada media entrada. Por suerte para las bandas, los promotores, organizadores, etc no fue así.

Había una lona que tapaba las gradas situadas frente al escenario, donde se instaló el mercadillo y por supuesto dos barras en cada lateral (4€ la caña, 10€ el medio litro, bocadillos, pizzas y demás avituallamiento).

Seguía HAMLET, con un Wizink que ya se estaba llenando, mis pulsaciones ya eran normales mientras sonaban clásicos que reconocía como «Irracional» o «Jodido Facha».

Tuvo un detalle Molly que me gustó. Es un clásico que el líder del grupo se dirija al público mencionando el nombre de la ciudad donde se realiza el evento. «Madrid, habéis sido la hostia» por ejemplo. Molly se acordó de los que habíamos venido desde fuera: «Madrid, y los que no sois de Madrid que hay peña que viene de lejos». Este detalle, que os puede parecer una gilipollez, para mí merece que se destaque. Los que no somos de Madrid, nos hemos tenido que pedir el día en nuestros respectivos curros para poder ir al KAOS ZONE FEST Pagar medio de transporte, dietas, alojamiento, etc. Por eso el precio de la entrada era atractivo. Menos de 40€ por 4 bandas de primer nivel español, y dos de ellas en la cresta de la ola del panorama internacional bien merecía el esfuerzo.

Terminado HAMLET apareció el que fue mi anfitrión esa noche, mi colega desde el colegio conocido como el Q-john ( si llega hasta aquí en la lectura de la reseña probablemente se esté empezando a moder las uñas). El Q-john llegó a esa hora porque acababa de bañar junto a su mujer, a su primogénito de dos meses y era la primera salida «nocturna» que hacía. Agradecer a la familia por su hospitalidad la noche del KAOS, y al pequeño por no llorar en las horas de sueño. Esa noche Q-john fue, tal y como él me dijo: «he sido tu mula de carga». Estaba en lo cierto. Nos fuimos en busca de otro colega del colegio, Johnny que para mi logística estaba mal colocado, concretamente en el lateral izquierdo del escenario, mientras que los fotógrafos accedíamos por el lateral derecho. Como aquello se estaba petando de peña, el Q-john se quedó con mi cachi de cerveza en la mano izquierda, con el suyo en la derecha y con mi mochila de asas de Motörhead, que no pesaba poco, a la espalda. Me entró el pánico con el timing y no podía quedarme sin entrar al foso para ANGELUS APATRIDA.

Con ANGELUS ya me lo tomé con más calma en el foso. Si durante HAMLET disparé fotos en ráfaga como si no hubiese un mañana, aquí lo hice de otra manera. Me acordé de conversaciones pasadas con fotógrafos de conciertos de Vigo, de cómo lo hacen y traté de aplicarlo. Los temas de ANGELUS es raro que no bajen de los 5 minutos, así que tenía 15 para hacer las cosas medianamente bien. El resultado juzgadlo vosotros, aquí lo tenéis. Su setlist fue bastante equitativo, tocando de los últimos tres trabajos dos temas de cada uno de ellos. De su concierto me quedo con la segunda parte del setlist, ya que las tres primeras, en el foso no se escuchaban bien, había como un efecto pantalla que por lo menos a mí no me permitía oírlos bien (lo mismo me pasó con SOZIEDAD ALKOHOLIKA). Fuera del foso el sonido era otro y me gustaron: «One of Us» y «Sharpen the Guillotine», del Cabaret, «Give’n War», que ya es un clásico de sus directos, y el tema con el que cerraron «You are Next» de The Call. El único “pero” que les puedo poner a ANGELUS fue el volumen. Para mí gusto sonaron bajos. No sé si se debió a que no eran los cabezas de cartel, pero me quedé con esa sensación, de que fueron conservadores con el volumen. Igual por el recinto, igual por su papel de gregarios, me faltó ese punto. Por otro lado está lo que yo objetivamente veía en la pista, y es que la peña se lo estaba pasando en grande, incluso mi mula de carga particular, que no controla a los ANGELUS, decía entre tema y tema «pues están divertidos».

Con la sensación en el cuerpo de que mi labor como redactor y fotógrafo, me estaba quitando de disfrutar el festival al 100% ( también pudo ser eso, y no el volumen), tocaba el turno de SOZIEDAD ALKOHOLIKA. Por tercera vez en la noche, acudí al foso poco antes de S.A. No me volví loco sacando fotos a diestro y siniestro, sino que esperaba a que la luz de los focos no diese en la pantalla de la Canon. Durante esos temas en el foso, otra vez el efecto pantalla en el sonido. Una vez salí del foso, el sonido era otro. SOZIEDAD ALKOHOLIKA sonaron de puta madre. Y a partir de ahí ya me desquité. Había merecido la pena madrugar, coger un vuelo tempranero, llegar a Madrid a la hora del cafelito con porras. Había merecido la pena el juicio de la duda ajena («es un cartel que no me atrae», «los puedes ver un montón de veces»…) porque este que os escribe llevaba más de 20 años sin verlos. Lo mejor del concierto: “Tiempos oscuros”, “Palomas y Buitres”, “Ratas” y ojo al último tercio del concierto porque aquello ya se convirtió en baile, en fiesta rachada, en una maravillosa foliada: “Peces Mutantes”, “No Kiero Participar”, “S.H.A.K.T.A.L.E.” , “Piedra contra Tijera” (temón), “Cuando Nada Vale Nada” y “Nos Vimos en Berlín”. Como diría Juan, su vocalista, “mecagoenlahostia”. Y con Juan me detengo un momento. Me flipa desde siempre la voz de Juan, tiene tanta personalidad, es tan carismática, junto con esa batería, que pese al cambio que sufrieron en 2014, siga sonando practicamente igual, la labor de ambos, y el resto de la banda, hacen que sus álbumes de directo y sus directos estén tan de puta madre valorados.

Y es que con ellos, y no descubro nada, su música se presta al baile, a hacer el gilipollas con mis compañeros de concierto empujándonos mientras cantas «peces mutantes ya están aquí», o cualquiera de las mencionadas.

Terminado el concierto, whatsApp de Bea Bathory, compañera durante los intermedios previos al foso, para despedirnos. Ella que sí vio los 4 grupos me dijo que CRISIX fueron los que más le habían gustado. Yo me quedo con SOZIEDAD ALKOHOLIKA, porque tuvieron un sonido de puta madre y fue lo que se esperaba de ellos, fueron fiesta rachada.

Y aquí es donde se generó el debate camino a casa del Q-john, previa parada por el Mcdonalds para avituallamiento (fingers de pollo con salsa de queso). Johnny, mi otro colega que estaba mal colocado para mi logística fotográfica, y el Q-john destripaban el setlist de S.A., argumentando que habían tocado pocos temas antiguos. Yo no estaba de acuerdo y estilo a mi paisana Yolanda Díaz, voy a dar un dato: 13 de sus 21 temas del setlist fueron de antes de la caída de las Torres Gemelas. Si le añades los dos temas, temones, del «Tiempos Oscuros» que tocaron «Tiempos Oscuros» y «Piedra contra Tijera», el setlist fue bastante cuco.

La última vez que los vimos juntos, fue en el año 2000, en la Sala Óxido de Vigo. Esa noche del KAOS parecía que nuestros “yos” adolescentes caminaban por la viguesa Avenida de Madrid, saliendo de aquel concierto del año 2000. Conciertos en los que salíamos con las camisetas empapadas en sudor, y aquellos hijos de puta de la Sala Óxido cortaban el agua del grifo, para que la peña consumiera.

Seguimos caminado, discutiendo de buen rollo sobre conciertos a los que ir y a los que no ir. Los adolescentes desaparecieron en el momento en el que Q-john, metió la llave en la puerta y me pidió silencio, llevándose el índice a los labios. El pequeño recién nacido de dos meses dormía ajeno al KAOS.